Las urbanizaciones se han convertido en pequeños núcleos urbanos en los que poder practicar deporte, pasear, charlar con tus vecinos e, incluso, comprar. Multitud de personas comparten un mismo espacio en torno al hogar que les proporciona bienestar y seguridad. Sin embargo, no siempre es fácil garantizar este último aspecto, por eso cada vez son más las urbanizaciones que optan por sistemas de controles de acceso, de los que os hablamos en este artículo.
Todas estas dotaciones requieren de un buen número de llaves para acceder a cada una de las instalaciones comunitarias, una circunstancia que puede resultar molesta y poco utilitaria, dificultando la gestión de nuestros llaveros. Por esta necesidad, el sector de la cerrajería ha aplicado la última tecnología para concentrar todas las llaves de acceso en un solo dispositivo con dos tipos de sistema muy diferentes pero que cumplen la misma función: las llaves de acceso electrónicas y los sistemas de llaves maestras.
Controles de acceso electrónicos
El sistema electrónico es muy sencillo y proporciona un alto nivel de seguridad. Cada llave es asignada a un propietario, que queda registrado en una base de datos. Esta es la primera barrera de seguridad, que permitirá desactivar la llave cuando su propietario comunique la pérdida, conocer la llave que ha abierto un determinado acceso y controlar el número de copias de la llave.
Por otro lado, los controles de acceso electrónicos también permiten diferenciar entre niveles de permisos. Es habitual que en las urbanizaciones no todos los propietarios paguen la cuota correspondiente para acceder a todas las zonas comunes, como piscinas, pistas deportivas, portales, garajes o trasteros. Con los controles de acceso electrónicos, cada vecino sólo podrá hacer uso de su llave para las instalaciones en las que tenga permiso.
Otros sistemas que también se están empleando en viviendas exclusivas o centros en los que se precisa la máxima seguridad son los de lectura biométrica y código de seguridad, que se pueden complementar entre sí o, incluso, sumándoles una llave electrónica.
Llaves maestras
El sistema de llaves maestras es similar al anterior en cuanto a las posibilidades de acceso de cada vecino, sin embargo, no permite manejar datos, desactivar las llaves extraviadas o evitar que se realicen copias.
El esquema de funcionamiento es muy simple, y se basa en una estructura piramidal. En la cúspide, se sitúa la llave maestra, aquella que va a poder abrir todas las puertas de la urbanización u oficina. En la parte intermedia, encontramos otras llaves maestras de segundo nivel, que sólo son válidas para determinadas cerraduras del sistema y, por último, las llaves más simples, que sólo son capaces de abrir una de las puertas.
Para abrir todas las cerraduras de una sola comunidad se precisan de media entre 5 y 7 llaves. Con las tarjetas de proximidad de un control de accesos, sólo necesitas una única tarjeta para acceder a todos los espacios de la comunidad. Lo mismo ocurre con los sistemas de llaves maestras, que ayudan a reducir notablemente tu juego de llaves. Una tendencia que cada vez se hace más popular en empresas, urbanizaciones y viviendas exclusivas. En i-cerrajeros.es puedes preguntarnos sin compromiso y te podremos asesorar de todas las necesidades que se verán cubiertas con el control de acceso, su instalación y mantenimiento.